50.000 horas de bordado para la nueva caballería egipcia

La nueva Caballería Egipcia, bordada ininterrumpidamente entre 2011 y 2015, ofrece un recorrido bíblico (Génesis y Éxodo), histórico y mitológico que plasma la opresión egipcia sobre el pueblo judío a lo largo de 14 siglos, desde los tiempos de José hasta que con la muerte de Cleopatra VII se extingue la dinastía ptolemaica o de los lágidas en el 30 a.C., convirtiéndose Egipto en provincia romana.

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Bordadoras dando las últimas puntadas al manto de Nut.

Consta de 7 mantos: José ante el Faraón, la Muerte de los Primogénitos, Éxodo, Las Pirámides, Nut, Osiris y Cleopatra. Los cortes y grecas son obra póstuma de Joaquín Gimeno, mientras que los motivos centrales en sedas, basados en la pintura victoriana del siglo XIX y los grabados de Doré, corresponden a José López Gimeno y Joaquín Bastida y han sido realizados bajo la dirección de taller de Cristóbal Leal.DSC_0190

La presencia del mundo egipcio dentro de la procesión azul data de finales del siglo XIX, cuando se incorpora el grupo del Triunfo del Cristianismo que incluía personajes procedentes de la civilización egipcia que posteriormente se fueron desgajando para constituir grupo propio. Así, en 1917 fueron bordados mantos de inspiración egipcia destinados a los próceres a caballo que acompañaban a Cleopatra desde comienzos de los años 20. Desde 1962 la Caballería Egipcia desfila como grupo procesional de manera continua hasta la actualidad, habiendo adoptado distintas concepciones, siendo la penúltima la establecida de 1984.


José ante el Faraón. De color granate, su motivo central, dirigido por López Gimeno, muestra a José, hijo de Jacob, interpretando los sueños del Faraón.

Génesis, 41, 16 —No está en mis manos el poder para hacerlo —respondió José—, pero Dios puede decirle lo que su sueño significa y darle tranquilidad.


Muerte de los primogénitos. De color morado, representa la consumación de la última de las diez plagas de Egipto. Ramsés II sostiene a su primogénito muerto en el motivo central del manto en el momento exacto en el que decide que el pueblo hebreo abandone Egipto. Obra de Joaquín Bastida.

Éxodo 12, 30-  Y esa misma noche el faraón se levantó, lo mismo que todos sus siervos y todos los egipcios, y en todo Egipto hubo un gran clamor, porque no había una casa donde no hubiera un muerto.


Éxodo. De color cobre, representa el momento en el que Ramsés II, tras sufrir las diez plagas enviadas por Yahvé, permite al pueblo judío marchar de Egipto. Después de  430 años, seiscientos mil hebreos siguen a Moisés abandonando Egipto en busca de la tierra prometida. El motivo central es obra de Joaquín Bastida.

Éxodo 12, 31-  Esa misma noche el faraón mandó llamar a Moisés y a Aarón, y les dijo: “Apártense de mi pueblo, ustedes y los hijos de Israel, y vayan a servir al Señor, tal y como lo han pedido”.



Las pirámides. De color caldera y con una greca egipcia de tonalidades naranjas muestra el gran legado de la cultura egipcia a la Historia del Arte: las imponentes pirámides de Giza. En el motivo central, obra de López Gimeno, figuran las dos principales pirámides: Keops (la única de las siete maravillas del mundo antiguo que sigue en pie) y Kefrén, así como la mitológica esfinge de Giza. Se trata de una obra simbólica que representa el poder del imperio egipcio y la opresión impuesta sobre otras civilizaciones convertidas a la esclavitud, generaciones y generaciones de judíos entre ellas, que construían las obras faraónicas hasta perecer.

Éxodo 2, 23- 23 Mucho tiempo después murió el rey de Egipto. Los israelitas, sin embargo, seguían lamentando su condición de esclavos y clamaban pidiendo ayuda.


Nut. Obra completa de Joaquín Bastida, representa a la diosa egipcia del firmamento retratada en estilo pictórico victoriano. Aparece desnuda, bajo su propia constelación y con la espalda arqueada representando la bóveda celeste. La mitología señala que Nut habitaba un sicomoro en Heliópolis que, según la tradición, era el mismo bajo el que la Virgen María descansó en su viaje a Egipto.

 Mateo 2, 13 Después que ellos partieron, un ángel del Señor se apareció en sueños a José, diciendo: «Levántate; toma al niño y a su madre, y huye a Egipto. Quédate allá hasta que yo te diga, porque Herodes va a buscar al niño para matarlo.»

El manto, de color azul, recoge detalles del zodiaco egipcio del templo de Denderah, único dedicado a la diosa Nut.


Osiris. Obra completa de López Gimeno, de color verde, cuenta con un motivo central inspirado en las decoraciones de la tumba de Seti I, una de las más grandes y hermosas del Valle de los Reyes. El faraón Seti I es recibido por Osiris, dios de la muerte y la resurrección, quien juzga a los difuntos por el peso de su corazón, ante la atenta mirada de Horus y Osiris. En la escena, Osiris, encargado de recibir las almas en el panteón egipcio, aparece retratado de manera clásica, momificado, con la corona atef, el cayado heka y el mayal, y protegido por dos chacales alusivos a Anubis, dios de los embalsamadores.


Cleopatra. Última reina del Antiguo Egipto, aparece representada en estilo victoriano en un manto de color azul aguamarina. En los medallones figuran sus dos amores, los poderosos Julio César y Marco Antonio. Representa el fin del dominio egipcio y el comienzo de la supremacía romana, período durante el cual se produciría el nacimiento, pasión y resurrección de Jesucristo. Obra de Joaquín Bastida.

Texto: Andrés Porlán Torroglosa 
Fotografías: Javier Martínez García

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